Hacer ejercicio en pareja puede hacer que ambos se sientan más responsables e incluso puede ayudarlos a entrenar más duro en el gimnasio. Pero cuando tu compañera de entrenamiento también es tu compañera en la vida, las cosas pueden complicarse un poquito si no lo llevan de la manera correcta.
Si ya eres un fanático del gimnasio, pero tu pareja NO TANTO, invitarla es una excelente manera de incorporarla a otro lado de tu vida, es una cita poco convencional, así que existe la posibilidad de que a ella le resulte intrigante. Además, activa las endorfinas, lo cual es bueno para estas fechas de San Valentín.
Claro, podrías ir también al cine, a cenar y tomar algo más. Pero hacer ejercicio en pareja tiene muchos beneficios, incluido el alivio del estrés, mejorar el sueño y sí, un mejor sexo, pero hacer ejercicio juntos también genera confianza y camaradería. Sin embargo, ten cuidado, esta no es la típica ida ruda al gimnasio con tus amigos. Al iniciar una sesión de entrenamiento con tu princesa, tu enfoque debe ser diferente. Lo último que quieres hacer es volver a casa cansado, sudoroso y enojado.
Regla #1: Sé comprensivo. No seas el entrenador
A menos que tu novia te haya pedido específicamente que le des en la torre en el gimnasio, deja tu silbato de sargento en casa. Si eres un profesional del fitness, evita tratar a tu cita de entrenamiento como a un cliente. Lo más probable es que ella no se haya inscrito en eso. Y si no eres un profesional, esa es una razón más para rechazarlo un poco. Mejor sé alentador. "Gran trabajo. Ese es un buen set. Tu forma se ve genial ". Si necesitas corregir la postura o la forma de tu pareja, asegúrate de mantener un tono de apoyo y ayuda y evitar las críticas. Mantenlo ligero y divertido.
Regla #2: Mantente dispuesto a probar algo diferente
Quizás te encanta hacer pesas y quizás a ella le encanta Pilates y Zumba. No todo está perdido. Tienes que estar dispuesto a probar algo que esté fuera de tu rutina normal. Seguirán haciendo ejercicio y tendrán algo que experimentar juntos. Mejor aún, acepta probar su estilo de entrenamiento favorito si ella prueba el tuyo a cambio.
Regla #3: No lo conviertas en una competencia
Lo último que quiere tu pareja es sentir que la estás humillando. Asegúrate de que se sienta apoyada y animada. Pero si ves que ella quiere darle con todo en el BEAST MODE ON, pueden probar un entrenamiento de intervalos. De esa manera, ambos pueden trabajar al mismo tiempo, pero no necesariamente tienen que hacer lo mismo. Si tú o ambos son competitivos, cronometran su entrenamiento de intervalos y llevan la puntuación contando repeticiones. El perdedor paga la cena.
Regla #4: Compartir los deberes del liderazgo
Muchos vamos directamente a agitar los brazos un par de veces, tocarse los dedos de los pies dos veces e ir directo a las pesas libres. Pero si a tu novia le encanta estirar, déjela que te guíe en su rutina previa y posterior al entrenamiento. Si es una guerrera de la caminadora, déjala que marque el ritmo y decida cuándo aceleras o disminuyes. Porque si ella no es fan de levantar pesas, esta es su única oportunidad de brillar.
Regla #5: Comunica tus expectativas
Antes incluso de poner un pie en un gimnasio, es mejor tener una idea de lo que sucederá una vez dentro. Por ejemplo, si esperabas mantener una conversación durante todo el entrenamiento, pero tu pareja planeaba ponerse sus audífonos y estar en lo suyo. Además, es importante saber cuál es el estilo de cada quien. Descubre cómo le gusta que la animes: a algunas personas les gusta el amor duro, mientras que a otras se pueden ofender si eres muy estricto.
Regla #6: No tengas miedo de cuidarte también
Seamos sinceros. No todos estamos en el mismo nivel de forma física todo el tiempo. Es posible que debas reducir la velocidad para obtener los beneficios de hacer ejercicio con tu pareja. Pero eso no significa que debas ignorar completamente tus propias necesidades. Si sabes que necesitará más, llega temprano y adelanta algunos ejercicios. Simplemente planifiquen con anticipación y asegúrense de comunicar si van a hacer trabajo adicional antes o después.
¿A tí cómo te ha ido entrenando con tu novia?
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